Desde que me mudé a Estados Unidos me convertí en Uber de mis hijos. Viniendo de una ciudad como Buenos Aires, en la que iba a todos lados caminando (el jardín, la plaza, la casa de mi mama) fue un shock acostumbrarme a que dos horas de mi dia (mínimo) se iban a destinar a llevar y traer niños.
Aprendí a optimizar el tiempo, usar el carro de oficina, y tomarme con calma...pues no hay otra opción.
Muchas veces me encuentro frenada con el carro esperando a alguno de mis tres hijos y se me cruzan mil pensamientos por la cabeza...y por eso decidí agregar algunos capítulos de "yapa" con pensamientos desde carpool.
Espero que disfruten el mini-episodio!
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Cariños
Andy
